Poemas municipales – Santiago Llach
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Pensar en el acto poético como un acto político es una estupidez. Es lo mismo que decir que Platón podría destacar jugando al paddle.
Hay una confusión en todo esto de la política y la poesía… Aunque tengan el mismo Dios hay algo que no cuadra.
La poesía es la espectacularización de la estética humana: en pocas palabras: la belleza. La política es una experiencia filosófica y pública. Llach es hábil, intelectualmente sólido.
Admirador de Borges y de Proust son lo mismo? En este grupuaculo de obras maestras hace funcionar el dónde de la política con el error de la poesía.
Como Perón y como el Che, como Mao, como Marilyn Monroe: hace de la intimidad un acto democrático.
¿Qué más se le puede pedir a un libro de poemas? Y a la poetry en gral. Sí mi general!
